lunes, 30 de abril de 2012

Six.

La forma geométrica, a veces errática y accidentada de tus sombras
las saboreo con mi lengua que percibe más que húmeda niebla.
Tus haceres, tus curvos ojos.
Todo de ti me sabe, y me sabe a placer.

miércoles, 11 de abril de 2012

Quiero escribir, pero me sale espuma.

Como garrapata, absorví de nuevo la sangre que su cuerpo regeneró naturalmente. Ojalá hubieran vacunas anti mi.

De Rodolfo J. M., quien me recordó a Vallejo y a Rimbaud... a "Todos los Rimbauds":


Dime, ese tiempo gastado en las páginas de libros y libros, esas horas empeñadas en escribir algo que quizá no tiene el menor sentido para otra persona que no seas tú, ¿valdrían la pena si supieras que no tienes talento, que no estás sino imitando los gestos de gente como la que nunca podrás ser, que intentas justificar tu mediocridad con la historia de que estás escribiendo una obra maestra? ¿Sabes? Puede ser horrible estar frente a una hoja en blanco. César Vallejo lo dijo: quiero escribir pero me sale espuma. Son palabras hermosas, pero atemorizantes; muchos de nosotros dejamos que la espuma se acumule alrededor, petrificándose, inmovilizándonos para siempre. O por el contrario, escribimos; y escribimos mierda. Eso es peor, sobre todo si eres tan vanidoso como para suponerte con talento... ¿Entiendes? Por eso preferí dejarlo.

Todo esto sucede bajo el agua, J.M; Rodolfo, 2008


Bajo el agua, evidentemente bajo el agua.